Refugio: Cementerio

Tras varias generaciones ostentando el desagradecido oficio de enterrador, el único guardián del cementerio de la basílica de St. Charles sigue siendo el viejo Fausto. Acompañado únicamente por su fiel sabueso Muelas, el anciano enterrador pasa las noches recorriendo los sepulcros, mosquete en mano, asegurándose de que ninguna lápida vuelva a levantarse.

La carta de refugio Cementerio te permite robar una carta del mazo de descartes al principio de cada turno. Porque siempre es mejor empezar la noche con una carta de más.



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